De la granja a la mesa, de la huerta a la mesa y viceversa.

 
 

Uno de nuestros sueños, como apasionados vegetarianos, pescatarianos y flexitarianos que hemos sido durante décadas, ha sido siempre tener nuestra propia huerta, producir nuestras propias frutas, hortalizas y flores.

Mientras esto ha ido convirtiéndose en una realidad, siempre tuvimos la idea de que el siguiente paso sería cuidar, alimentar y producir nuestros propios animales, no solo para saber qué vida han vivido, qué han comido o cómo han muerto, sino para también honrar todo este proceso de la mejor manera que sabemos, cocinándolo en su totalidad, en una especie de gran homenaje al ser vivo que nos alimenta.

Nuestros animales viven en libertad, no están estabulados ni encerrados, son cuidados y alimentados con los mejores restos vegetales de nuestras cocinas, además de con piensos y cereales exclusivamente ecológicos (piensos Goymar/ Biofeed) o cultivados por nosotros.

Dentro de esta idea, tratamos de recuperar y poner en valor razas autóctonas de Cantabria que en cierto punto hayan podido estar al borde de la desaparición, como la gallina pedresa, trabajando junto a la Asociación de Gallina Pedresa de Cantabria, el cerdo celta o la oveja carranzana de cara roja.

Nuestra granja son dos hectáreas de montaña en las inmediaciones del puerto de Alisas, en las faldas de los Valles Pasiegos.